Vamos a recordar uno de esos momentos en la historia, detonante de la entrada en la Segunda Guerra Mundial de los Estados Unidos, que hasta es momento se había mantenido al margen, como parte beligerante, aunque si brindaba apoyo a los países aliados. Un día, que quedara en la memoria de los estadounidenses, como "una fecha que vivirá en la infamia", en palabras de su presidente, Franklin Delano Roosevelt. Pero primero, que motivo este fatal desenlace.
El Imperio de Japón, al finalizar de la Primera Guerra Mundial, y después de luchar en el bando aliado, se consolido como la tercera potencia naval del mundo, así como su ingeniería naval, capar de superar a las otras dos potencias (Inglaterra y Estados Unidos). Fruto de esta colaboración, Japón recibió como compensación de guerra, varios submarinos germanos, que fueron minuciosamente estudiados, y darían pie a la posterior potente flota submarina japonesa. La rápida modernización de la armada japonesa alarmo a ambas potencias, y los Estados Unidos intentaron una desaceleración de la carrera armamentística naval nipona. Para lograr un acuerdo, Inglaterra y Estados Unidos renunciaban a construir nuevas bases en Hong Kong y Filipinas, a cambio, Japón se comprometió a no construir mas acorazados en un plazo de 10 años, cosa que no evito que transformara buques ya existentes, o creara nuevos submarinos, asi como fuese desarrollando nuevos superacorazados (clase Yamato) al terminar esos 10 años. Japón acabo siendo un serio contrincante de los EEUU, debido al intervencionismo de estos en su interés de conquista de nuevos territorios.
Durante la segunda guerra Sino-Japonesa, EEUU se puso del lado de los chinos, pero no estaba dispuesto a declarar la guerra con Japón. Suponían que Japón no correría el riesgo de una confrontación, y confiaban en alcanzar una solución diplomática.
Al continuar Japón su escalada expansionista, EEUU autorizo una restricción a las exportaciones de restos de acero y petroleo. Ante la perspectiva de un embargo total de petroleo, Japón alzo sus miras contra las colonias occidentales en Asia apoderándose de la rica región productora de las indias Orientales holandesas, estableciendo un perímetro inexpugnable en el Pacifico.
El 26 de julio de 1941, tras otra incursión japonesa en indochina, EEUU congeló los activos japoneses, y estrechó aun mas el embargo de petroleo. En los meses previos al ataque, Japón ya respiraba un ambiente pre-bélico con EEUU, poniendo incluso fecha del ataque para el 30 de noviembre. El día 1 de diciembre, el emperador Hirohito aprobó la declaración de guerra.
El día 26 de noviembre, la flota japonesa partió desde el norte de Japón. Dicha flota estaba compuesta por los seis portaaviones de que disponía Japón, con 460 aviones, y navegaron en completo silencio de radio hasta llegar al norte de Hawaii. El plan de ataque fue concebido por el almirante Irosoku Yamamoto, el cual conocía muy bien la mentalidad estadounidense, debido a su formación en la universidad de Harward, y sabia que una Japón no podía enfrentarse en una guerra de desgaste con un país con los recursos de los EEUU.
Sin embargo, desatados los eventos que conducían a un confrontamiento inevitable, se convirtió en un formidable , a la vez que respetado adversario para los Estados Unidos.
El objetivo del ataque principal era destruir los acorazados y los portaaviones, y en caso de no estar estos, destructores y cruceros amen de cualquier buque de guerra, así como de instalaciones en tierra. Este ataque debería ser efectuado en al menos tres oleadas, pero, como veremos mas adelante, solo llegaron a efectuarse dos. Este movimiento de fichas, tendría consecuencias mas tarde.
A las 7.49h del 7 de diciembre de 1941, comenzó el ataque. En la primera oleada, 183 aviones llegaron a Oahu, divididos en tres grupos:
Los lentos aviones torpederos japoneses aprovecharon la sorpresa para torpedear los mas jugosos blancos, los acorazados. El primer ataque pillo desprevenidos por completo a los marinos estadounidenses, que se despertaron con el tiroteo y las explosiones, y hubieron de vestirse mientras iban corriendo para ocupar las posiciones de zafarrancho de combate. La sorpresa fue tal, que los almacenes de munición estaban cerrados, los aviones en sus aeródromos sin preparar. Solo 4 de las 31 baterías antiaéreas lograron ponerse en funcionamiento.
A las 8.50h comenzaba la segunda oleada. Estaba compuesta por 171 aviones, los cuales tambien estaban divididos en 3 grupos:
A los 90 minutos del comienzo del ataque, este finalizo, quedando como resultado 2386 muertos entre los estadounidenses. Hubo 55 bajas civiles, la mayoría por el fuego antiaéreo al caer sobre zonas residenciales. Casi la mitad de los muertos, 1177, se produjeron al estallar la santa-barbara del acorazado USS Arizona. Los objetivos navales fueron 18 buques hundidos o encallados (USS Nevada, por ejemplo).
Tras acabar la segunda oleada, se barajo la posibilidad de enviar una tercera, destinada a destruir los tanques de combustible, almacenes de torpedos, instalaciones de mantenimiento y diques secos. Varios oficiales japoneses instaron a efectuarla al almirante Chuichi Nagumo, comandante en jefe de la flota de ataque japonesa. Incluso los capitanes de los portaaviones estaban dispuestos y preparados para dar el golpe final. Historiadores afirman que de haberse enviado esa tercera oleada, la armada estadounidense habría tardado mas de un año en recuperarse, y quizás la guerra se hubiese alargado un par de años mas. Las razones esgrimidas por Nagumo para no hacerlo fueron:
Almirante Irosoku Yamamoto. |
El objetivo del ataque principal era destruir los acorazados y los portaaviones, y en caso de no estar estos, destructores y cruceros amen de cualquier buque de guerra, así como de instalaciones en tierra. Este ataque debería ser efectuado en al menos tres oleadas, pero, como veremos mas adelante, solo llegaron a efectuarse dos. Este movimiento de fichas, tendría consecuencias mas tarde.
A las 7.49h del 7 de diciembre de 1941, comenzó el ataque. En la primera oleada, 183 aviones llegaron a Oahu, divididos en tres grupos:
- grupo 1: encargado de bombardear y torpedear acorazados y portaaviones
- grupo 2: encargado de bombardear la isla Ford y el aeródromo Wheeler
- grupo 3: encargado de atacar aeronaves de la isla ford, aeródromos de Wheeler y Hickam, Barber´s Point y Kaneohe
Los lentos aviones torpederos japoneses aprovecharon la sorpresa para torpedear los mas jugosos blancos, los acorazados. El primer ataque pillo desprevenidos por completo a los marinos estadounidenses, que se despertaron con el tiroteo y las explosiones, y hubieron de vestirse mientras iban corriendo para ocupar las posiciones de zafarrancho de combate. La sorpresa fue tal, que los almacenes de munición estaban cerrados, los aviones en sus aeródromos sin preparar. Solo 4 de las 31 baterías antiaéreas lograron ponerse en funcionamiento.
Esquema del ataque. En rojo trayectoria de las oleadas japonesas, en azul, aeródromos y ruta de los portaaviones americanos. |
- grupo 1: a su vez, subdividido en 2 grupos, se encargo de bombardear los aviones e instalaciones de Wheeler, Hickam, Barber´s Point y Kaneohe.
- grupo 2: bombardeo de acorazados y cruceros y portaaviones en la bahía de Pearl Harbour.
- grupo 3: ataque y ametrallamiento de las unidades aéreas restantes en los aeródromos previamente atacados.
A los 90 minutos del comienzo del ataque, este finalizo, quedando como resultado 2386 muertos entre los estadounidenses. Hubo 55 bajas civiles, la mayoría por el fuego antiaéreo al caer sobre zonas residenciales. Casi la mitad de los muertos, 1177, se produjeron al estallar la santa-barbara del acorazado USS Arizona. Los objetivos navales fueron 18 buques hundidos o encallados (USS Nevada, por ejemplo).
Telegrama enviado por el comandante en jefe de la zona del Pacifico, a todas sus unidades navales alertándolas del ataque en Pearl Harbour. |
Almirante Chuichi Nagumo |
- La eficacia del fuego antiaéreo aumento en la segunda oleada, en el que se produjeron la mayoría de las bajas japonesas. Creyó que una tercera oleada pondría en peligro a la flota, y la posible perdida de numerosas aeronaves.
- Los portaaviones americanos seguían sin ser localizados, pudiendo quedar dentro del radio de acción de sus aeronaves, así como el desconocimiento del estado de los bombarderos basados en tierra, ni sus condiciones operativas.
- Una tercera oleada, hubiese necesitado mas tiempo de preparación y respuesta, y quizás se hubiesen necesitado que algunos aparatos regresasen de noche, no teniendo las técnicas apropiadas para hacerlo, y suponía un riesgo que Nagumo considero innecesario.
- Sus reservas de combustible estaban al limite, y haberse quedado en la zona, les habría supuesto tener que abandonar algún buque en el regreso.
- Se dio por bueno el resultado, conseguidos alguno de los objetivos mas importantes de la misión (hundir o dañar seriamente los acorazados), y decidió preservar la flota, antes que sufrir riesgos innecesarios.
USS Arizona ardiendo, después de reventar la santabarbara. Sus restos aun siguen en el memorial a los caídos |
Las consecuencias del ataque no tardaron en llegar. El día 8 de diciembre, EEUU declaraba la guerra al imperio de Japón. Los EEUU estaban muy molestos por la ausencia de ruptura de relaciones, paso previo a una declaración de guerra, por parte de los japoneses, y lo considero un acto traicionero. El presidente firmo la declaración de guerra, y se refirió al ataque con la frase con la que he abierto la entrada, una fecha que vivirá en la infamia.
Cinematografía: varias películas tratan o tienen como fondo el ataque a Pearl Harbour. La que mejor retrata los acontecimientos aquí relatados, es "TORA! TORA! TORA!" de la 20th. Century Fox, en 1970. Otro gran filme, que aborda la vida de soldados estadounidenses en los meses previos y durante el ataque es"De aquí a la eternidad" de Columbia Pictures, en 1956. En 2001, con "Pearl Harbour", Touchstone Pictures retrata el ataque de manera muy efectista, así como la misión Doolitle en abril de 1942, la primera incursión y bombardeo sobre territorio japonés como represalia por el ataque a Pearl Harbour. En el genero fantástico, tenemos "El final de la cuenta atrás", de 1980, en la que portaaviones nuclear (actualmente en servicio) USS Nimitz atraviesa un agujero de gusano, y se planta en diciembre del 1941, y se plantean barrer la flota japonesa con el moderno armamento del que disponen.
Borrador del discurso del presidente Franklin D. Roosvelt, ante el congreso, tras el ataque. con modificaciones manuscritas de la mano del propio presidente. |
Fuentes: Wikipedia / wikimedia, La Segunda Guerra Mundial, vol II, ED. Aribau
No hay comentarios:
Publicar un comentario